Señor del castillo...

>> 13 marzo, 2007

Señor del castillo,
sombrío y silente,
¡he llegado a tus puertas!...
con la paz del alma
y un corazón sincero y candente,
besando la brisa,
que acaricia tu frente...
¡No oías mi voz!...
y ... ¡yo te llamaba!
¡No veías mis ojos!...
y...¡yo te miraba!
¡No sentías mi piel!...
y...¡yo, ya te amaba!
¡Señor del castillo!...
¡Señor que aguardas
con billete de ida...
¡te propongo caminar,
de la mano conmigo!...
¡comparte tu vida!...
¡te ofrezco un destino!...
¡te ofrezco mi vida!...
¡ te ofrezco todo!...
¡te pido que seas, tan sólo mío!...
¡Prepara tu nao!...
¡Arría las velas!...
¡Carga las bodegas...
de amor, cariño,
ternura y abrigo...!
En mi puerto encendí
la lumbre eterna...,
que ilumine tu rumbo...
¡con mis ojos por guía!,
¡mi corazón por compañía!,
¡mis manos que naveguen
durante esas noches frías!
y...¡ mi cuerpo que te dé cobijo,
vistiéndote de amor, mi niño!...
¡Encendí la chimenea!...
¡Me puse a tejer!...
¡Preparé ron caliente
y tu pipa favorita,
para contarte historias...
de mi tierra y su gente!...
¡Ansiado Capitán!...
¡Anhelado marino!...
¡Deseado eternauta!...
¡te quiero, Querido!
Ya estaba escrito...
con versos ignotos,
que tú y yo algún día...
¡escribiríamos un nuevo destino!...
El tiempo es sólo un suspiro...¡Allí nos encontraremos!...

REGINA NOCTIS

8 comentarios:

Anónimo martes, marzo 13, 2007  

Fantástico baño de ternura.
Estuviste deslumbrante, Regina.
Se le encoge a uno el alma leyendo lo de hoy.

Una vez más demuestras que el sentimiento, además de sentirse, se puede transmitir mediante la palabra escrita.

¡Precioso, entrañable, sobrecogedor, ..., sencillamente tuyo!

Besos y abrazos.

Anónimo martes, marzo 13, 2007  

No sé como hace esta mujer, pero nos pone en revoluciones o nos hace
temblar con lo que dice.Es muy
bonito lo de hoy.Coincido con Taras, totalmente tuyo.
La imágen que pusiste quedó como anillo al dedo.

Cariños.

Anónimo martes, marzo 13, 2007  

¡Chiquita, Regina!¡Te pasaste!¡Que
bonito! Da algo en el corazón al leer.Vos siempre esperando a ese marinero o a ese pirata como decís.La verdad hay un montón de
emociones en el poema que hacen
teclear hasta el más bueno.

Hay un mensajito al final que no es para todos. Se nota jajajaja.

Besitos a todos.

Anónimo martes, marzo 13, 2007  

Pepe ¡qué te pasó? se te arrugaron los dedos? vos no te llamás"jos´"
¿te pusiste nerviosito? jajajjaja
¡Cheeeeee!¡qué lindo lo de hoyyyy! ¡ está bonito,bonito y muyyyyy romántico!¡ esa es la chica de la
carpeta azul! romántica,perdida en sus pensamientos, suspirando ¡la
conocemos bien! ¡muuuuyyyy bello!

Besos a todos.

Anónimo martes, marzo 13, 2007  

ese señor del castillo, escuchó muy
bien.¡qué tierno, dulce y bonito poema!Habías escrito muchos, pero este es de esos que dice taras.
No puedo agregar nada, porque me dejás sin hacer nada cuando te ponés así.

Cariños y besitos a todos.

( empezamos así...)

Anónimo martes, marzo 13, 2007  

Esto se puso bonito, romantico, así como suavecito, delicadote, con la foto hasta moño le pusiste.
Che, si los chicos dicen que se emocionan, es que es para éso. Me
gustó.

Besitos chicos y chicas.

Anónimo martes, marzo 13, 2007  

Che, hace días que Uwito no aparece, se nota que le pusiste alma y vida a ésto. Fuiste más romántica que nunca. Ya te veo los ojitos así chullitos.

Besos amigos y amigas.

Anónimo miércoles, marzo 14, 2007  

Hola, patota.

Teniendo en cuenta que se trata de un blog frecuentado por adolescentes" (¿verdad, Juani?) me pareció muy apropiada la imagen de hoy. Sí, señor. No zahiere la sensibilidad del espectador y mucho menos la de los chicos. Pepe creo que ya empieza a tener síntomas preocupantes: pérdida de la noción de su propia identidad (no sabe cómo se llama), pulso débil y trémulo (no es capaz de atinar a escribir su nombre)...
Y, digo yo, algo tendrán las imágenes que ver con eso. Recuerdo que de mozalbetes nos decían que hacer ciertas cosas conllevaba quedarse ciego. Luego es un milagro que los visitadores masculinos de este blog sigan (no digo sigamos, porque yo voy con mis gafas de madera) conservando la vista, ya que no el pulso -como demuestra el estado de nuestro dilecto amigo. jeje.

Pero no se regocijen las chicas, que cuando llegue el frío invierno ya querrá alguna hoguera para calentarse y... acaso no quede leña de tanto incendio que llevamos. :P jajajajajaja.

Muy lindo todo lo de estos días, Regina; pero el poema del "Señor del castillo..." es un canto al AMOR que no deja indiferente a quien lo lee. Es sublime y maravilloso.

Como las distintas partes de mi anatomía van paulatinamente fallando, esta vez fue la "piñonera", se me quedó haciendo "tac-tac-tac-tac"... ya se me cayeron un paleto, dos incisivos y otros dos molares.

¿Ves, Pepe?, vos perdés el pulso, yo parezco ya un puzle del cuerpo humano. Soy desmontable. jajajaja.

Lo del "tac-tac-tac" me trae a la cabeza el recuerdo de sor Cipriana. ¡Pobre sor Cipriana!. En una misión que me tocó creo que el confín más alejado de la tierra, allá donde Jesucristo dio las tres voces y no le oyó ni Dios, había un convento de monjas al cual pertenecía ésta que os menciono. No lejos había un pueblecito al que acostumbraban a ir para avituallarse. Pues cierto día, se le había olvidado a sor Cipriana hacer las compras de los elementos de costura y acordándose a última hora de la tarde, para no ser reprendida por la Superiora, se aventuró a ir al pueblo sola.

Hizo las compras y ya con el atillo de hilos y otros enseres, se encaminó de regreso al convento. Había ya anochecido y al dar la vuelta a la esquina de una de las últimas callejuelas para salir del pueblo, advirtió un "tac---tac---tac", se paró, miró hacia atrás y observó a un tipo jorobado, malencarado y con pata de palo. Sor Cipri continuó su camino, y como oyera que el "tac---tac---tac" persistía, optó por no salir del pueblo y dar antes un par de rodeos por las calles para ver si realmente la seguía.

El traqueteo de la pata de palo contra el empedrado no cesaba, por lo que aceleró su paso, y pasó a oír un "tac--tac--tac--tac", giró una calle más y comenzó a caminar lo más rápido que pudo. El sonido pasó a ser un "tac-tac-tac-tac". Asustada se lanzó a correr cuando de pronto se dio cuenta que se había metido en un callejón, se volvió y allí enfrente tenía al jorobado con su pata de palo. Aterrorizada sólo alcanzó a gritarle con gesto de impotente rabia: "¡Cojo asqueroso y horrible!". El hombre se quedó inicialmente desconcertado, pero lejos de sentirse insultado y menospreciado, de inmediato repuso tranquilamente con total e innegable acento argentino: "No te preocupés, syo te enseño".

Ale, ya regresé. ¡El retorno de Uwe!. jajajaja. Gracias por preocuparos de mí (Acaso Uwe estaba en la UVI, y no haciendo uvitos precisamente). jeje.

Sabéis que me encantan las "reuniones" con la patota. Si falto es porque tareas de "más alto nivel" me ocupan. Tenedlo por seguro y cierto.

Sed felices.