Presentia-Absentia
>> 06 octubre, 2006
Mi insospechado rostro eterno ausente, con la llegada de la primavera se deleita. Es otro modo de presencia.
La ternura besa mis cabellos, perfumados, con las nubes del alba...Me siento una pequeña huérfana de naufragios anónimos recitando poemas para ti...
Entre rocas de ensueños velo quimeras febriles, hablándole a mis gentes con una lengua que se instala en los corazones, lanzando al Edén hasta el último suspiro...
¡Heme aquí! ¡Sola! Tinta humana,pluma indeleble, luz desmesurada, copa volcánica...¡de pie!, ¡incólume!, conocedora de los místicos secretos, estela hiriente que dejan los barcos...escuchando una voz, atada a ti por lazos que no aprietan jamás pero más firmes que el espacio circular...
Pisan mis pies agonías de luces, sonidos roncos de atabales, mientras mis pensamientos, montados sobre capiteles vuelan en fragmentos, reconstruyendo parte de tu vida, cerrándolos con torbellinos de barro y creando armaduras desde el infierno hasta el cielo para ti, plena de amor, cariño y devoción infinita...
A veces anhelo coser los días, reconstruir la geografía, aprisionar tu sonrisa, desprender tu pabellón y anclarme entre tus brazos...¡Sólo a veces!
Alma que canta con gozo, dicha, satisfacción, felicidad, ¡eje de frescura!, ¡huracán tenebroso!...Capitana paciente y obediente, que sabe templar las cuerdas de la guitarra, asombrándote cada día con la música que te subyuga, ¡la del más puro amor...!
Con mi cariño, siempre vuestra...Regina Noctis
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